jueves, 19 de julio de 2012

WALTER HUGO... UN CUARTO DE SIGLO GRITANDO GOLES...


Walter Hugo cumple 25 años en el relato deportivo en Rosario. El narrador uruguayo repasa sus primeros momentos en los medios de la ciudad, habla de sus maestros y de sus instantes más recordados en una cabina y con micrófono en mano.




Nació en Artigas, allí donde el Uruguay se recuesta sobre la frontera con Brasil. En ese lugar bucólico y apacible empezó a prestarle su garganta a la pasión del fútbol, con la oreja pegada a la radio en la que brillaban maestros de la narración deportiva como Heber Pinto y Carlos Solé. Varias décadas después, Walter Hugo García Da Rosa inscribe su nombre entre las voces inconfundibles y clásicas de la ciudad de Rosario. 

Walter Hugo cumple 25 años en el relato deportivo rosarino. Pasaron muchas cosas desde aquel 18 de julio de 1987, cuando cruzó el Río de La Plata para empezar a ser mitad uruguayo y mitad argentino. O mejor dicho rosarino; porque, como suele decir Jorge Valdano, “ser rosarino es una manera exagerada de ser argentino”. 

Es feriado en Uruguay y Walter atiende el llamado de Cruz del Sur, medio en el que trabajó durante varios años, mientras toca la batería y disfruta de algunos días de descanso junto a varios amigos. “A Rosario me lleva Jorge Cimadoni, de Rueda Publicidad, cuando se va Pablo Saro. Fue a buscar un relator a Uruguay y habló con el Toto Da Silveira, que me recomendó. Vine con Eduardo Vera, debutamos el mismo día; él en LT8 y yo en Radio 2”, arranca el relator con sus recuerdos.  

En un momento de su juventud, Walter Hugo bajó a la ciudad balnearia de Piriápolis para ser jefe del destacamento de bomberos, mientras seguía profesando su amor por la radio en la emisora local. “Yo relataba en la radio de Piriápolis y llegué directo a Radio 2. Lo primero que vi fueron carteles pegados por toda la ciudad anunciando mi llegada. Me pedían autógrafos. No lo podía creer”, bucea el narrador en su memoria. 

“El primer partido que relaté fue 18 de julio de 1987, un Central-Estudiantes de Mérida en Venezuela, por Copa Libertadores”, cuanta Walter; y agrega: “El primer gol que relaté fue de Hernán Díaz, aunque el titular era Di Leo. Mi comentarista en aquel partido fue Migue Ángel Tessandori”. 

Es obvio que la radio cambió en forma drástica desde finales de la década del 80 hasta estos días. “El medio cambió muchísimo. En aquella primera transmisión trabajé con cuatro hilos, que ahora ya no se usa”, rememoró. E hizo una comparación de su trabajo: “Seguramente perdí velocidad, pero me encuentro mucho más asentado. Al principio relataba a puro huevo, como relatan los relatores de campo”. 

La voz del relator uruguayo es única en el mundo y Walter Hugo le encuentra explicación al fenómeno: “Tiene que ver con la escuela, con los narradores iniciales, que eran voces muy pesadas. Acá en Argentina los que tienen ese tono son locutores o buenos cantores de tango. Somos de vos muy pesada”.  E hizo una especie de homenaje a sus maestros en el relato: “Carlos Solé para mí fue el número uno de mis referentes y Heber Pinto el número dos. Pero el más grande de todos es Víctor Hugo Morales”, confesó. 

El fútbol de Rosario también mutó desde aquel lejano 1987 hasta ahora: “Cuando yo llegué, Rosario era la capital del fútbol argentino. Central había salido campeón y Newell’s había salido segundo a un punto y después vino el Piojo Yudica, iniciando un período de gloria”, recordó. 

Desde el 89 al 92 Walter volvió a su tierra natal para relatar en Radio Oriental. En esa emisora cubrió el Mundial de Italia, hasta que lo tentaron para regresar a Rosario. “No pude negarme. Argentina entraba en la etapa del uno a uno y me ofrecieron una montaña de plata”, contó el relator. Trabajó 12 años en Radio 2, hasta que en 1999 pasó a La Red. Y en el 2000 comenzó su etapa en LT3, con el programa Estadio 3, que sigue en el aire de Rosario todas las tardes. 

Cuando se le pide que repase momentos destacados de su carrera, a Walter le salta rápido uno a la memoria: “La Copa Conmebol del 95 fue una satisfacción muy grande porque fue la única radio que siguió toda la copa. Cuando Central perdió el primer partido de la final por 4 a 0 en Brasil, nosotros decíamos que se podía, que los hinchas tenían que reventar la cancha porque el milagro era posible. Y cuando se dio los hinchas me lo reconocieron, me acuerdo que venían a la cabina y me gritaban ”. 

Y eligió otro: “También fue muy fuerte el campeonato de Newell’s con el Tolo Gallego. Hicimos doce horas de transmisión. Son momentos de radio que te marcan para siempre”, destacó.  

Los campeonatos mundiales también están en un rincón privilegiado del baúl de sus recuerdos: “Cubrí seis mundiales y todos fueron especiales y magníficos. El más exótico fue el de Corea-Japón 2002. La comida era tan fea y rara que en 22 días bajé 4 kilos, jamás hice una dieta tan efectiva”, bromeó Walter. 

Fanático del dibujo, de la literatura y sobre todo del rock de los años setenta, Walter Hugo desmiente a Gardel y Lepera y certifica que “veinticinco años es mucho”. Los goles en su garganta suenan distinto. 


¡FELICIDADES MAESTRO! ¡POR CUARTO SIGLO MÁS!